Pablo Herrera es conductor de metrobús desde hace seis años, tiempo en el que se siente contento de todo lo que ha logrado.
Este 25 de julio de 2022, en el marco del Día del Conductor, le compartimos esta interesante experiencia.
Anteriormente, Herrera estuvo laborando por ocho años al mando del volante, de manera consecutiva en otra empresa. Una vez le dieron la oportunidad de manejar un bus, de aproximadamente 14 toneladas, aceptó el reto y se capacitó para hacer un trabajo eficiente.
No obstante, cada día se escribe una historia. Y es que con esta función se tiene que aprender a lidiar con usuarios, el tranque y hasta con otros conductores en la vía, entre otros aspectos.
Pero este trabajo le ha dado satisfacciones a Pablo Herrera. Una de ellas ocurrió recientemente en Albrook cuando se le cayó el dinero a una persona. Él observó el acto, se bajó del bus, recogió el dinero y fue a entregárselo.
En este lapso, una persona intervino y le dijo que no era necesario. Pero sus valores fueron más allá y no quedó conforme hasta devolver el dinero ajeno. "Yo no sé si eso era lo único que tenía", expresó el trabajador del volante.
Herrera contó que tiene por costumbre estar a tiempo en su trabajo. En sus turnos de madrugada se levanta bastante temprano y le gusta desayunar "pesa'o", por ejemplo, arroz con carne y café, Eso le da las energías suficientes, llega las 12 mediodía y es feliz, expresó.
A futuro, le gustaría jubilarse en esta empresa que cuenta con más de tres mil operadores. De lograrlo, podrá decir que se siente satisfecho con el mismo, con su trabajo y con la patria.
A sus 58 años de edad, cada vez que termina su jornada retorna a su casa en San Miguelito, donde disfruta de la familia. Le hubiera gustado estudiar algo más, pero a estas alturas de la vida considera que lo da todo para que su hijo más chico logre concluir sus estudios universitarios.
Por sus manos han pasado algunos de 1,436 buses que componen la flota de Mi Bus (Gran Viale - naranjas 1,233 y Torino - azules 203). Pero eso no es todo. En cada trayecto debe ser responsable del viaje de unas 80 personas que caben dentro de una unidad. Imagínese que en los buses naranja pueden viajar sentados 35 personas y el resto parados; mientras que en un Torino o buses azules pueden viajar 45 personas sentadas y los otros de pie.
¿Cuál es la claves para hacer un buen trabajo en esta misión? Herrera respondió que hay que laborar con armonía, paciencia y como lo manda la empresa. Ser buena persona le ha dado muchas satisfacciones.
La otra faceta de Pablo
día a día pudo conocer que Herrera tiene un pasatiempo muy interesante. Y es que le gusta la lucha libre, deporte que empezó a practicar desde 1981. En noviembre de ese año fue su primera pelea inspirado en los "Gemelos Fanstásticos", quienes le motivaron a escudriñar este mundo.
Aunque su familia no está de acuerdo, la lucha a él lo entretiene. Una de su competencia más importantes fue luchar contra Marabunta. Curiosamente en esa pelea perdió su máscara. También tuvo el privilegio de enfrentarse a Errikichi y Septiembre Negro.
"A todos los que les gusta este deporte, disfrútenlo, entrenen siempre, sigan esforzándose para mejorar cada día", concluyó el conductor.